sábado, noviembre 24, 2007

Ideas básicas

Como dije, estoy pensando en un entorno basado en las TIC enfocado a las clases personalizadas (las conocidas clases particulares, o one-to-one). He visto que hay muchos materiales para las clases convencionales en el aula, cursos y ejercicios enfocados al autoaprendizaje, y cursos online más o menos estandarizados. He encontrado algunas obras y páginas web que ofrecen información y recomendaciones interesantes para este entorno de trabajo. Sin ánimo de ser exhaustivo, describo a continuación algunos rasgos relevantes de las sesiones one-to-one y de los cursos online.
Veamos algunas características de las clases particulares.
Puntos fuertes:
  • Posibilidad de adaptarlas de forma muy precisa a las necesidades y objetivos del alumno.
  • Atención exclusiva del profesor.
  • En algunos casos, cierta flexibilidad de horarios.
  • Es posible crear un clima de confianza que elimine los habituales temores del alumno.
Puntos débiles:
  • Necesariamente requieren concertar una cita.
  • Es más caro que una sesión en grupo.
  • Si no hay buena "química" entre profesor y alumno, la situación puede ser muy incómoda.
  • Carecen de interacción con otras personas.
Examinemos ahora los cursos online
Puntos fuertes:
  • Rompen las barreras de espacio y tiempo, por lo que pueden realizarse casi en cualquier momento y lugar.
  • Si están bien diseñados, pueden ser muy atractivos variados y motivadores, ya que pueden explotar la capacidad multimedia del ordenador.
  • La conexión a la red permite el acceso a un inmenso caudal de recursos y fuentes de información.
  • Son más económicos que los cursos convencionales o las clases particulares.
Puntos débiles:
  • Al carecer de contacto personal, requieren una sólida voluntad por parte del alumno.
  • Generalmente son cursos interesantes para niveles iniciales y medios, pero es difícil que colmen las necesidades de los estudiantes de nivel avanzado.
  • Son cursos estandarizados, generalmente por niveles o áreas de interés, pero raramente pueden adaptarse a los objetivos y necesidades de cada estudiante.
  • Si no están bien diseñados, pueden ser una auténtica pérdida de tiempo y dinero.

Lo que tengo en mente es combinar lo mejor de las clases one-to-one y de los cursos online. Para ello parto de los siguientes supuestos:

1) Es posible obtener un perfil del estudiante que tenga en cuenta su estilo de aprendizaje, su nivel inicial, su disponibilidad para el estudio, su interés en tener encuentros one-to-one y con qué periodicidad, su disponibilidad para contactar personalmente con otros estudiantes de su zona y de nivel similar, los temas que más le motivan o interesan, las habilidades que desea desarrollar, etc. En cualquier momento debería poder revisarse y actualizarse el perfil.

2) Es posible crear un marco para la organización y diseño de unidades didácticas. El marco actuaría como una especie de "contenedor" al que se pueden incorporar diversas actividades y contenidos. Estaría dividido en diversos apartados, uno para cada fase de la unidad didáctica (warm-up, introducción del tema, ejemplos, práctica controlada, etc.). En principio el marco no tendría contenidos específicos, pero sí requeriría incluir en cada uno de sus apartados determinados tipos de materiales pedagógicos y/o actividades, con el fin de respetar la coherencia y una secuenciación adecuada. El marco deberá dimensionarse para que la realización completa de la unidad didáctica se adapte a la disponibilidad temporal del estudiante, prefijando su duración total esperada y la duración de cada uno de sus apartados (con un cierto margen de holgura, obviamente). Deberían generarse tantos marcos (inicialmente vacíos) como unidades didácticas se prevean. Esta colección ordenada de marcos servirá de soporte al plan de trabajo personalizado cuyo diseño se describe en el punto 7).

3) Es posible crear un repositorio de materiales susceptibles de ser utilizados pedagógicamente. Cada elemento debería ser catalogado y convenientemente etiquetado por el profesor, haciendo constar características como: tipo (documento de texto, imagen, video, página web, etc.); formas de explotación (porque un mismo documento es susceptible de muy diversas explotaciones), y para cada explotación se especificará el nivel requerido, prerrequisitos, si es individual o grupal, las habilidades que trabaja, perfil de aprendizaje más adecuado, tiempo requerido para su realización, orden de precedencia respecto a otras actividades, materiales o accesorios necesarios, etc. (algunos autores proponen más de cien características para la catalogación). Para la catalogación de todos los elementos se tendrían en cuenta los descriptores y definiciones contenidas en el MCER.

4) Es posible enseñar al estudiante el manejo de las herramientas y programas que necesitará para el estudio online.

5) Es posible diseñar un netbot (un robot de red) que rastree la red en busca de materiales interesantes para ser incorporados al repositorio, previo examen y catalogación por parte del profesor.

6) Es posible diseñar un sistema experto que, teniendo en cuenta el perfil completo del estudiante seleccione del repositorio los materiales y actividades, los más adecuadas a su nivel, disponibilidad horaria, posibles encuentros con el profesor y otros estudiantes, campos de interés, objetivos y finalidad de su estudio.

7) El profesor, auxiliado por otro sistema experto, utilizando por un lado la estructura descrita en el punto 2, (una secuencia de marcos), y por otro lado la colección de materiales y actividades seleccionados en el punto 6, puede generar un "plan de trabajo" personalizado para cada alumno. El sistema experto podría facilitar enormemente el encaje de cada actividad o material en el punto adecuado de la secuencia didáctia, basándose en base al etiquetado de cada elemento.

8) Es posible diseñar un entorno de trabajo para el profesor de tal modo que se facilite la gestión y seguimiento de cada uno de sus alumnos; la recopilación y etiquetaje de materiales, así como su incorporación al repositario; la gestión de una agenda global, en la que pueda anotar sus citas personales con los alumnos o los encuentros online (chat, videoconferencia, mundos virtuales, etc...); la corrección y/o feedback de las actividades realizadas por los alumnos; etc.

9) Es posible diseñar un entorno de trabajo para el alumno en el que pueda: ver y seguir el plan de trabajo diseñado para él; recibir el feedback correspondiente a sus actividades; comunicarse con el profesor u otros compañeros; acceder a otros recursos complementarios (diccionarios online, actividades, juegos, etc.); ver en la agenda compartida sus encuentros presenciales con el profesor u otros compañeros, y otros encuentros online; etc.

10) En cualquier momento del programa debería ser posible replantear los objetivos del alumno, añadir o eliminar áreas de interés, habilidades a desarrollar, disponibilidad para el estudio, nivel alcanzado, etc., de forma que podría generarse un nuevo plan de trabajo.

11) Además de la enseñanza/aprendizaje de la lengua, es posible potenciar la autonomía del estudiante mediante el feedback adecuado y un entorno que facilite la exploración autónoma.

12) Los alumnos que así lo desearan, podrían complementar su formación con la confección de un portafolio.

Pienso que un entorno como el descrito aumentaría sobremanera la eficiencia tanto del profesor como de los alumnos. Se preservarian buena parte de las virtudes de las clases presenciales tradicionales, aunque "en pequeñas dosis", y se aprovecharían al máximo las posibilidades tecnológicas. El tipo de actividades podría ser muy variado, y abarcaría desde la explotación de documentos de texto hasta la participación en videoconferencias, mundos virtuales o la realización de actividades "auténticas" en el mundo real, individualmente, con otros estudiantes y/o con el profesor. Además sería posible ir replanteando el plan de estudios en función del avance del estudiante, de los cambios vitales y de sus necesidades. Las actividades más "mecánicas" podrín ser corregidas automáticamente por el sistema (con reporte al profesor), y las más abiertas y creativas serían corregidas por el profesor. Además, la selección de materiales y actividades se realizaría en lo posible entre los temas que más motivan e interesan al estudiante. El seguimiento del aprendiente sería detallado y éste no tendría la sensación de estar "abandonado" a su suerte frente a la máquina.

Hasta aquí un esbozo general de la idea. Cada uno de los puntos antes descritos debe ser desarrollado y desmenuzado al detalle. Además, entiendo que antes de entrar en faena, es necesario:

  • Sentar y describir las bases teóricas y metodológicas que lo soportan.
  • Recopilar información sobre sistemas similares (en todo o en parte) que ya estén implantados.
  • Consultar con expertos en cada apartado (diseñadores de páginas web, creadores de sistemas expertos, especialistas en diseño de materiales, etc.) sobre la viavilidad de la idea.

Por el momento, me bastará con saber si los que estais leyendo esto pensais que es factible o... ¡enfín! lo que penseis sobre esta locura.

En función de vuestros comentarios y de lo que yo vaya aprendiendo, en futuros posts iré desgranando y detallando la idea.

Gracias anticipadas.

3 comentarios:

LolaBCN dijo...

Hola David,

Y enhorabuena por tu blog, ¡qué diseño! Pero para ti, que eres más experimentado con estas herramientas, debe de resultar fácil,¿no?

Pues, la verdad, es que me parece muy interesante tu proyecto. Yo ya hace tiempo empecé a pensar en un proyecto así, combinando las posibilidades del e-learning, la videoconferencia como lugar de encuentro entre el tutor y el alumno y desarrollar de alguna forma una plataforma en la que se incluyesen las unidades para trabajar de forma autónoma y gestionar luego las reuniones. Para ello, lo que sí que creo es que se necesita de un informático para poder hacerlo, porque se me ocurrían muchas ideas que luego me frenaba mi novio, informático también, porque no podían desarrollarse sin una dedicación técnica importante... Al final lo dejé y decidí seguir con mis clases particulares normales, pero aún me quedó ahí la espinita, que ahora estoy empezando a retomar de nuevo, para ver cómo compaginar la alfabetización lectoescritora, con la alfabetización digital y la ASL, claro, con mis mujeres de Barbate... ya te seguiré contando!
Un saludito

David dijo...

Hola Lola

Pues me alegra saber que tú también estás interesada en el tema. Yo también pensaba que sería necesario programar bastante para poder desarrollar una plataforma adecuada a las clases particulares. De hecho, es una opción. Pero estoy viendo que la red ofrece muchos recursos totalmente gratuitos que pueden adaptarse a esta actividad, y algunos son de muy alta calidad. Ya he hablado con Joan-Tomás y con mi tutora de proyecto para poder enfocar la memoria del master en este sentido (inicialmente había propuesto otro tema). Así es que si sigues interesada, puedes visitar mi blog de vez en cuando.

Precisamente esta mañana he visitado tu blog. La verdad es que tiene un aspecto muy atractivo. Se nota que estás comprometida socialmente. Hace falta más gente así.

Seguimos en contacto.

David

J. Carlos dijo...
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